La innovación al servicio de la escuela.

Según la Real Academia Española una maestra es una “Persona que tiene título para enseñar en escuela de primeras letras las materias señaladas en la ley, aunque no ejerza.” pero, ¿qué conlleva realmente ser maestra?

Una maestra debe ser una acompañante, una guía, una amiga, una ayudante, incluso en algunos casos una madre. Para poder llevar a cabo todas estas innumerables labores las maestras y los maestros necesitan formarse y así cumplir adecuadamente con las expectativas que la sociedad tiene de esta profesión y con la que se crea él mismo.

Esta es la conclusión que nos presentaba Rafael Martín el día 26 de abril en la segunda conferencia sobre innovación. Rafael es el director del colegio Santa María del Carmen (Carmelitas) de Elda y nos aportó una nueva visión sobre escuela, alumnos, maestros e innovación.

La definición que dio él de escuela es la siguiente “Un centro educativo es un servicio al cliente. Un colegio es un servicio que da a la sociedad para el bien común que conlleva invertir tiempo en las personas para conseguir la felicidad personal”

Los clientes en este caso harían referencia tanto a los alumnos del propio centro, a los padres, madres o tutores, al profesorado, al personal administrativo y de servicios (PAS), a las empresas proveedoras, etc. En definitiva cada uno de los agentes que forman los centros.

Para atraer a estos clientes el marketing puede ser una herramienta de ayuda para el colegio, ya que la enseñanza ha cambiado por que los clientes han cambiado y se nos exige cada vez más cubrir las carencias de casa.

Un ejemplo que puso muy ilustrador para observar los pocos cambios que se han producido en las escuelas es que un maestro de historia de hace cincuenta años actualmente podría entrar hoy en un aula y daría su clase con la misma metodología que empleaba para sus antiguos alumnos, pero sin embargo en otras profesiones como la medicina esto no puede darse, es decir, un médico que lleva veinte años sin ejercer no podría operar con las mismas técnicas y con los mismos recursos con los que lo hacía antaño. En pocas palabras, en todas las profesiones han innovado pero en educación no.

Ahora en estos últimos años es cuando se ha empezado a innovar afectando a la organización, a los trabajadores y a los clientes de un centro empujándoles a adaptarse a las nuevas situaciones de colaboración, cooperación y ayuda.

Muchos maestros aún no han interiorizado estos nuevos métodos y no comparten sus ideas eficaces ni su trabajo pero debemos tener siempre presente que “los maestros no somos competencia unos para otros, todos somos, toda la vida, aprendices y maestros”.

Rafael también explico cómo su centro llevaba a la práctica este ambiente. En su centro:

• Centro plurilingüe.
• Incremento del periodo de prácticas, aprendizaje cooperativo.
• Proyectos de innovación: Estimulación temprana, inteligencias múltiples en matemáticas y conocimiento del medio, plan lecto-escritor.
• Plataforma digital con Tablet.
• Revisión de los planes de estudio enfoque basado en la práctica.

Yo creo que esta metodología basada en la práctica y en la colaboración es muy acertada porque los niños aprenden practicando y haciendo, y además deben aprender a desenvolverse como lo que son, seres sociales.